Jesús Molina vive junto a su familia en el paraje Pozo La Zanja, cercano al Parque Nacional El Impenetrable. Aprendió a trabajar la madera junto a su padre, Cándido. A la sombra de los árboles de su patio van dando vida a diferentes piezas, en especial cucharas de madera de Palo Santo que representan tapires, cigüeñas, catas, osos, entre otras especies del monte que buscan hacer conocer a las personas. Padre e hijo forman parte del Programa Emprendedores por Naturaleza y se comprometen así a ser guardianes del monte.

Hasta hace unas semanas, trabajaba la madera únicamente de forma manual, con escofinas, lijas y vidrio. Desde la FLW quisimos darle un impulso a su emprendimiento con la donación de una motosierra. Así Jesús encontró una nueva forma de trabajo y empezó a desafiarse a realizar nuevas piezas. Esta nueva herramienta se traduce en un aumento de la producción que es bien recibida por los visitantes de la zona a través del punto de venta en la Escuela Taller que se encuentra en La Armonía, en el acceso al Parque Nacional. Además, sus piezas también cruzan fronteras provinciales gracias al interés de compradores a través de la plataforma de ventas online.

La Fundación Norma y Leo Werthein brinda su apoyo a aquellas personas que se encuentran ante un contexto desafiante. Queremos que tengan ese aliento para dar el próximo paso en la transformación de sus vidas y las de sus comunidades. Queremos darles Impulso.

Confiamos en Jesús y sus talentos para seguir transmitiendo historias a través de sus artesanías.